Cómo detectar los síntomas de una lesión
22 de febrero de 2018
Las lesiones por correr son la cruz de todo corredor. Si tú o alguien que conoces habéis sufrido alguna de las interminables lesiones posibles, sabrás lo frustrante que puede ser.
Las lesiones por correr son la cruz de todo corredor. Si tú o alguien que conoces habéis sufrido alguna de las interminables lesiones posibles, sabrás lo frustrante que puede ser. Una lesión te aparta del entrenamiento e incluso de participar en una carrera de la que tantas ganas tenías.
Como cualquier enfermedad o lesión, lo mejor es detectarlas a tiempo, siempre después de prevenir, claro. Cuanto más tiempo tardes en tratar una lesión, peor. Presta atención a los primeros síntomas de las lesiones por correr y descubre cómo tratarlas.
Las lesiones por correr más comunes
Aunque correr sigue siendo uno de los deportes más seguros, tiene sus riesgos. Hay muchos tipos diferentes de lesiones por correr que suelen afectar a los corredores. Estas son algunas de las lesiones por correr más comunes:
- Rodilla de corredor: Los síntomas incluyen dolor y sensibilidad alrededor de la zona de la rodilla.
- Fascitis plantar: Dolor en el talón que aparece al lesionarte los músculos del pie.
- Calambres en las espinillas: Un dolor común que aparece mientras corres y aumenta debido al sobreentrenamiento.
- Fracturas por estrés: Pequeñas fracturas en las espinillas, huesos del pie y del talón.
- Talón de Aquiles: Si el tendón de Aquiles está tenso, puede causar molestias.
Aunque hay muchas otras lesiones por correr que podrías tener.
¿Estás lesionado? Avisos previos de una lesión por correr
Aunque es posible diagnosticarse una lesión propia, siempre es mejor hablar con un médico o un fisioterapeuta que pueda examinar la lesión. Dicho esto, estos son algunos de los síntomas que te pueden ayudar a descubrir si tienes una lesión por correr concreta:
- Sientes molestias en los talones, sobre todo por la mañana: Si sientes molestias en los talones después de correr y al levantarte (como si pisaras guisante duro), es posible que estés en las primeras etapas de la fascitis plantar, una lesión del pie que deberías consultar con un fisioterapeuta.
- Piernas y pies hinchados: Las piernas hinchadas pueden indicar una fractura por estrés.
- Te duele el talón y escuchas un crujido: Puede indicar que te has lesionado el tendón de Aquiles. Hay algunos remedios caseros, pero es mejor ir al médico.
Otras lesiones por correr pueden ser más difíciles de diagnosticar, pero es posible que te hayas lesionado si:
- El dolor no desaparece después de correr: Sentimos toda clase de molestias y dolores al correr y a veces lidiamos con algunas lesiones leves, como los calambres en las espinillas. Sin embargo, este tipo de lesiones normalmente desaparecen al dejar de correr o poco después. Si el dolor en las piernas, pies o articulaciones no desaparece después de unos minutos e incluso unas horas de reposo, es una señal de que algo va mal.
- El dolor aumenta cuando corres: Otro aviso de que podrías tener una lesión por correr podría ser que el dolor empeora cuando corres. Todos hemos oído que hay que correr por encima del dolor, pero podrás ver la diferencia entre las molestias del ácido láctico y algo más grave.
¿Qué hacer si crees que te has lesionado?
Como hemos indicado antes, lo mejor es ir al médico o al fisioterapeuta, sobre todo si el dolor es muy agudo, ya que no hay necesidad de aguantar el dolor. Aquí tienes algunos consejos que seguir si te duele correr:
- Para de correr si te duele mucho: Como ya sabes, correr puede conllevar molestias y dolores leves. Sin embargo, seguramente notes la diferencia entre un dolor aceptable y un dolor que indica que algo va mal. En estos casos, lo más importante es parar, ya que te harás más daño si sigues. Presta atención a los dolores agudos que sientas en los huesos, ya que son muy importantes.
- DHCE: El acrónimo DHCE significa descanso, hielo, compresión y elevación. Si crees que te has hecho daño, para de entrenar y tómate un descanso. Envuelve hielo o una bolsa de guisantes congelados en un paño y aplícalo sobre la zona afectada durante unos 20 minutos (hazlo varias veces al día mientras te recuperas). A continuación viene la compresión, con la que envuelves la zona lesionada con una venda elástica. Por último, elevación: usa cojines o almohadas para que la zona hinchada esté elevada, y si puede ser por encima del corazón, mejor, para reducir la hinchazón.
- Asegúrate de que usas las zapatillas adecuadas: Muchas lesiones por correr tienen su origen en el uso de un calzado deportivo no adecuado. Encuentra unas zapatillas para correr que se adapten a tu forma de andar, pronación y estilo de correr. Para ello, consulta con un experto para que analice tu forma de correr en una tienda de deportes.
Escucha los avisos de tu cuerpo
Para la mayoría de lesiones por correr, tu cuerpo te dará muchos avisos de que pasa algo. Si prestas atención a estos síntomas y actúas de inmediato, evitarás las peores lesiones y volverás a correr en poco tiempo.