Consejos para marcar tus objetivos de running en 2021
22 de marzo de 2021
Fijar unas metas realistas nos ayuda a alcanzar nuestros objetivos en todos los aspectos de la vida. Nos hace sentirnos más motivados y nos permite observar nuestros progresos mientras nos afanamos por alcanzar el éxito, algo que también ocurre con el running.
Fijar unas metas realistas nos ayuda a alcanzar nuestros objetivos en todos los aspectos de la vida. Nos hace sentirnos más motivados y nos permite observar nuestros progresos mientras nos afanamos por alcanzar el éxito, algo que también ocurre con el running. Si hace poco que has decidido empezar a correr o si este año quieres conseguir correr cada vez más lejos o más rápido, lee nuestra guía sobre cómo marcar unos objetivos de running realistas.
1. Antes de correr, camina
Si eres principiante en el mundo del running y has decidido que 2021 es el año en el que te pondrás en forma, no intentes abarcar demasiado en muy poco tiempo. Alternar entre correr y caminar te ayudará a desarrollar la fuerza y la forma física que necesitas para correr sin interrupciones. Después de un par de caminatas rápidas, puedes empezar a alternar entre trotar durante 30 segundos y caminar durante un minuto y medio. Te sorprenderá lo rápido que vas a ser capaz de correr durante 5, 10 y 15 minutos seguidos y, con el tiempo, de terminar una carrera de 5 km.
2. Entrena de forma constante
Uno de los objetivos para correr más importantes cuando eres principiante es ser constante. Empieza por correr con frecuencia y en distancias cortas al principio. Ponte como objetivo correr un determinado número de kilómetros o veces a la semana, como por ejemplo tres días a la semana para empezar. Tener constancia te ayudará a mejorar tu rendimiento de forma sostenible y evitar las lesiones y la tentación de abandonar.
Un ejemplo de estos objetivos puede ser correr 16 kilómetros a la semana o 12 veces al mes.
3. Usa el método SMART
En vez de fijar unas metas poco concretas y difíciles de medir, el método SMART (por su acrónimo en inglés) es una forma sencilla de definir unos objetivos para correr específicos y trazar un plan para alcanzarlos.
Te explicamos en qué consiste el método SMART:
Específico: elige un objetivo específico en el que puedas centrarte bien, como correr 5K en menos de 30 minutos.
Medible: piensa en cómo puedes medir tus progresos. Por ejemplo, cómo vas a cronometrar tus recorridos y asegurarte de que estás llegando a esos 5K.
Alcanzable: tu objetivo debe suponerte un reto, pero también tiene que ser factible. No debe ser algo que puedas conseguir en cuestión de un par de semanas ni tampoco ser poco realista, como correr una maratón en tres horas.
Relevante: a la hora de fijar tus objetivos de running, elige algo que sea significativo para ti. No tiene por qué estar relacionado con el ritmo o la distancia de tu carrera. Por ejemplo, puede ser algo tan simple como levantarse temprano y salir a correr dos veces por semana antes de ir a trabajar.
Temporal: un consejo importante a la hora de marcarse objetivos para correr como principiante es imponerse una fecha límite para cumplirlos. La sensación de urgencia te ayuda a motivarte y sirve de incentivo para esforzarte de verdad.
4. Gamifica tus objetivos
Convertir tu objetivo en un juego mediante un sistema de puntos y competiciones contra otros corredores puede ayudar a motivarte y hacer más que tu entrenamiento sea más divertido. Un estudio de 2018 descubrió que gamificar los entrenamientos con un programa para monitorizar la actividad física animaba a los participantes a caminar 2.200 pasos más al día. Tú también puedes conseguirlo usando una aplicación de fitness como ASICS Runkeeper App™. Puedes participar en retos virtuales, unirte a grupos de corredores y llevar un seguimiento de tus carreras con estadísticas.
5. Sal de tu zona de confort
Tus objetivos para correr tienen que ser realistas, pero eso no significa que no debas salir de tu zona de confort. Puedes seguir recorriendo la misma ruta de 5K de siempre, o también puedes proponerte algo que te suponga un reto, como por ejemplo inscribirte para participar en una carrera o una media maratón, o dejar de correr por carretera y explorar los senderos de la zona para disfrutar del aire libre.
6. Establece objetivos a corto y largo plazo
Además de marcarte unas metas básicas a corto plazo, también merece la pena pensar en otras a largo plazo que te motiven para seguir progresando. Cuando no tienes un objetivo a largo plazo es fácil perder el rumbo, dejar de correr durante varios días y saltarte los entrenamientos. Algunos ejemplos de objetivos para correr a largo plazo podrían ser:
- Correr al menos dos medias maratones al año.
- Correr tres carreras de 5K o 10K al año.
- Gana una carrera para tu franja de edad a nivel local.
Tu salud es lo primero
Independientemente de los objetivos de running que te hayas fijado, tu salud siempre va por delante. Si tienes una lesión leve, pero te falta salir a correr una vez más para alcanzar tu objetivo de kilómetros semanales, debes comprender que tu salud está por encima de todo. Descansar y recuperarse como es debido también es un objetivo en sí mismo que te ayudará a correr mejor a largo plazo.
Ahora que ya sabes cómo marcarte unos objetivos para correr realistas, lee nuestra guía para mejorar tu resistencia al correr y echa un vistazo a nuestros consejos para entrenar para tu primera carrera de 5K